martin... en viaje

todo relato empieza con un movimiento, desestabilización del personaje. en este caso, un viaje, una mudanza, periplo. de esto se trata: obviedades y petulancias: un portenio en córdoba

viernes, junio 24, 2011

2 poemas de Griselda García

EL BESO EN LA OSCURIDAD

Bajo la escalera
de la casa grande
escondidos del verano
la dulzura de tu piel
en la oscuridad
y la humedad habitual
de los espacios cerrados.

Entre bicicletas
escobas y jaulas
nos besamos.

El amor ardía en los cuerpos.
Había que besarse e incendiarse.



ORACIÓN

Oigo sus levísimas campanas.
Reina está aquí.

Me arrastro a su encuentro
beso el suelo bajo sus pies.
Soy su mejor esclavo, dice
y en su palmada firme lo compruebo
en la presión de la suela sobre mi cabeza.

De rodillas soy de todos
el más fiel
el más solícito.

Reina
dame la dicha de seguir
bajo tu ley.

Dame la alegría máxima
de servirte
siempre, siempre.




* estos poemas pertenecen a "El ojo del que mira", Ediciones La Carta de Oliver, Bs. As., 2009

jueves, junio 23, 2011

Desasosiego de Hincha (carta con ritmo de bolero)


"Sefiní querido. Por como se dio el partido creo que hasta la sacó barata. Quebrado, como el disco, así jugó. El otro bien, tranquilo, pero en un momento si arriesgaba un poquito más lo goleaba posta. Y para tus cocoreos de la "tonga", el primero fue de penal, bastante no cobrable por cierto. Lo del ataque es un espanto. Ojalá ni vayan el domingo, por cabrones. River es sombra. Y mucha. Además, la mitad con cinco ni juega la revancha. Vamos los pibes o vamos pa abajo. Pa colmo zapineo y Peñarol pierde la final de la Copa con el Santos. Mi redondez deportiva es un cuadrado"

miércoles, junio 15, 2011

Calendario de Actividades x 2



lunes, junio 13, 2011

Un poema de Pia Tafdrup


Me baño en la quieta luz de una gota
y recuerdo cómo llegué a ser:
Un lapicero puesto en la mano,
la fresca mano de mi madre sobre la mía, cálida.
— Y así nos pusimos a escribir
entrando y saliendo de corales,
un alfabeto submarino de arcos y puntas,
de caracoles espirales, de estrellas marinas,
de blandientes tentáculos de pulpos,
de grutas y formaciones rocosas.
Letras que con sus cilios se abrían paso
vertiginosamente entre lo blanco.
Palabras como lenguados aleteando
y enterrándose en la arena
o anémonas oscilantes con sus cientos de hilos
en un quieto y único movimiento.
Frases como cardúmenes
que se hicieron de aletas y ascendían
y también de alas que en compás se agitaban,
palpitando como mi sangre que a tientas
golpeaba estrellas contra el cielo nocturno del corazón;
fue cuando ví que su mano había soltado la mía,
que yo hacía mucho, escribiendo, me había desasido de ella.


domingo, junio 12, 2011

Un poema de Olvido García Valdés


Formas rapaces volaron en el lienzo

antes de la quietud.

La quietud: el mundo se ha dormido.

Has estado pintando -ahora sólo copias-

la barca, el castillo en la playa,

el lago -¿el mar?-.

Ambrogio Lorenzetti en blanco y negro.

Es gris el mar, es gris en tu pintura

el agua verde que dura ya seis siglos,

negra la barca, negro

el castillo y los viñedos al fondo.

El mundo se ha dormido y tú lo pintas;

es todo como un cuento,

pero no existe una bella durmiente

y está lejos el bosque;

no es un mundo de sueño el que describes

sino un mundo de ausencia:

ni una figura humana, nada animal o móvil

en el quieto paisaje.

Formas rapaces volaron en el lienzo

antes de la quietud. La quietud

de la vida, de lo que permanece

en lo deshabitado.



sábado, junio 11, 2011

nada que hacer

un montoncito de huesos
en el fondo del pozo
observando una sentencia
que aún no fue impresa